El éxito de empezar una nueva vida en la costa de España comienza desde el momento en el que empacamos nuestra primera caja. Llevando a cabo una mudanza de la forma correcta, nos libraremos de unos cuantos problemas. Para que esto sea posible, tomaremos en cuenta los siguientes consejos para las tres etapas más importantes del traslado: el embalaje, el trayecto, la llegada con su correspondiente desempaque. Consejos para empaquetar Destinar una habitación para las cajas: antes de comenzar, conviene disponer de un espacio, preferentemente una habitación, en la que iremos poniendo todas las cajas ya embaladas, cerradas y rotuladas. Cosas pesadas en cajas pequeñas: uno de los riesgos de las cajas es que se desfonden. A los efectos de evitarlo, pondremos los objetos más pesados en cajas pequeñas, dado que su resistencia es mayor. La ropa en sábanas: no hay necesidad de ocupar espacio de más al utilizar cajas para las prendas de vestir. Una forma de trasladarlas sirviéndose de una técnica muy efectiva para ahorrar lugar es envolverla en las sábanas. Aprovecha para hacer limpieza de armario: a medida que sacas tus pertenencias del armario y de los cajones, desecha aquello que sepas que no volverás a usar. Rotula: poner etiquetas simples te ayudará a ordenar tus pertenencias una vez que llegues. A su vez, serán de gran ayuda para el personal de la mudanza, quién podrá distinguir los objetos frágiles de los no tanto. No precintes los muebles: las cintas adhesivas pueden arrastrar consigo parte de la pintura del mueble cuando son retiradas. Si necesitas proteger ciertos muebles, cúbrelos con nylon o con sábanas viejas. Recomendaciones para el trayecto Mascotas: las mascotas deben viajar en sus correspondientes transportines. Los gatos tienden a escaparse y los perros podrían atacar al personal de la empresa de mudanza. Pertenencias indispensables encima: es recomendable viajar con todo lo referente a documentación, llaves de la nueva vivienda, anotaciones e incluso colaciones y bebidas, en un bolso de mano. Consejos para la llegada y el desempaque Pintar antes de mudarse: antes de llegar a nuestro nuevo hogar, este debe estar pintado y ya contar con todos los arreglos que pensábamos hacerle. Comenzar a hacer esta clase de tareas con todos los muebles en la casa resultaría incómodo y nada práctico. Encargar comida: es probable que la instalación demore uno o dos días en quedar lista. Por ello, necesitaremos contar con los teléfonos de locales de comida que se encuentren ubicados en la zona a la que nos estamos mudando. Recordar las veinticuatro horas de espera para volver a conectar la nevera: la nevera necesita reposar veinticuatro horas antes de volver a ser enchufada después de que se lo movió. Tengamos esto muy presente si es que trasladamos comida con nosotros. Montar y disponer los muebles primero: antes de colocar nuestras pertenencias en los estantes, será una buena idea dejar los muebles en el lugar en el que finalmente irán. Esto nos permitirá hacer cualquier modificación de último momento con los muebles aún vacíos. Liberación de mascotas: antes de liberar a nuestras mascotas de tu caja de transporte, nos aseguraremos que todas las puertas y ventanas estén cerradas. Este consejo es especialmente útil para los dueños de gatos, animales que tienen una fuerte tendencia a escaparse y a desorientarse con facilidad.